Qué es un absceso dental

Un absceso dental es una acumulación localizada de pus en el diente debido a una infección bacteriana. También conocido como flemón dental, es una enfermedad que puede ser muy molesta y dolorosa.

Se trata de una infección del tejido blando que puede provocar daños en la estructura interna del diente si no se trata a tiempo.

Existen dos tipos de abscesos dentales que se distinguen en función del lugar en el que se origina la infección:

• Absceso periapical: se produce en la punta de la raíz dental. Generalmente este absceso dental surge como consecuencia de un traumatismo oral o caries profundas que no han sido tratadas a tiempo o con eficacia.
• Absceso periodontal: se produce en las encías, en el área colindante con la raíz del diente, a nivel del periodonto. Esta lesión bucal también se conoce como bolsa periodontal. En este caso generalmente está provocado por patologías periodontales.

Causas que originan el absceso dental

Para prevenir la aparición de un absceso dental es conveniente conocer las causas que lo originan. 

Esta patología suele desarrollarse a partir de otras enfermedades bucodentales que no se han solucionado adecuadamente, como la caries dental y las patologías periodontales. Un fuerte traumatismo o la fractura de un diente son otras de las causas que pueden provocar la aparición de un absceso dental. 

Caries dentales y traumatismos

El absceso dental se puede formar si existe caries dental, o cuando un diente se rompe, se astilla o sufre alguna otra lesión. Las aberturas que se producen en el esmalte dental permiten que las bacterias infecten el centro del diente (pulpa). 

En casos avanzados en los que se alcance la pulpa o nervio dental es posible desarrollar pulpitis, una patología que produce la inflamación del nervio. La infección puede llegar a propagarse desde la raíz del diente hasta los huesos que lo sujetan. Uno de los síntomas más visibles son las encías con pus y la aparición de abscesos periapicales.

Como consecuencia de la infección se produce una acumulación de pus e inflamación de los tejidos internos del diente, provocando dolor de muelas. Si no se detiene la infección y continúa extendiéndose causará más dolor y puede destruir el tejido.

Patologías periodontales

La gingivitis es la fase inicial de la enfermedad periodontal, pero de no ser tratada para frenar su desarrollo y revertir sus efectos puede terminar derivando en periodontitis, una patología con consecuencias mucho más graves. Estas enfermedades se producen por la acumulación de bacterias que provocan alteraciones en el periodonto.

La periodontitis o piorrea es la fase avanzada de la enfermedad de las encías. En esta etapa se produce un deterioro progresivo de las encías y el hueso que sujeta al diente, pudiendo llegar a provocar su pérdida en los casos más graves. Además puede provocar otras afecciones en el organismo. 

Al producirse una retracción de las encías se forman las bolsas periodontales, lo que propicia el entorno perfecto para la proliferación de bacterias. Esto hace que la periodontitis sea la principal causa de los abscesos del periodonto.

Síntomas

• Dolor intenso de dientes o/y alrededor de la zona infectada. 
• Dolor al masticar.
• Sensibilidad de los dientes al calor o al frío.
• Hinchazón de la encía sobre el diente infectado.
• Aparición de un bulto o una úlcera en la encía en la zona de la infección que puede producir pus.
• Sabor amargo en la boca.
• Mal aliento.
• Malestar, inquietud, sensación general de enfermedad.
• Estado febril.
• Ganglios o flemones en la cara o el cuello.
• Área mandibular superior o inferior inflamada (un síntoma muy serio).

Tratamiento del absceso dental

El tratamiento del absceso dental tiene el objetivo de erradicar la infección y conservar el diente afectado siempre que sea posible. 

Antibióticos 

El tratamiento con antibióticos se utiliza para erradicar la infección bacteriana y solo deben tomarse bajo prescripción médica. 

Endodoncia o tratamiento de conducto

La endodoncia es un tratamiento conservador que se usa en el absceso periapical. Este procedimiento consiste en vaciar la cámara pulpar para eliminar el tejido infectado y sellar posteriormente los conductos con el fin de evitar la extracción del diente.

Curetaje dental

El curetaje dental o raspado y alisado radicular es un tratamiento que se utiliza con el objetivo de eliminar las bolsas periodontales en las que se acumulan las bacterias, evitando así que se produzca de nuevo una infección. 

Exodoncia

Como medida de último recurso se procederá a extraer la pieza si la infección bacteriana es muy severa. En este caso se procede a drenar el absceso dental antes de sacar la pieza dañada.

Recuerda que puedes evitar males mayores visitando con regularidad a tu odontólogo para detectar cualquier posible patología a tiempo.

Cuidamos tu salud bucodental

En Oris nos preocupa la salud de tus dientes. Por ello priorizamos la odontología conservadora para que puedas mantener tus propias piezas durante el mayor tiempo posible. 

Pide tu primera cita gratuita en Oris, tu Clínica Dental en Zafra.